Pequeños.......Secretos (Segunda Parte)

El tiempo me dio la razón...aunque también influyo mi intuición, y sí, se confirmo lo que pensaba, mi "pequeño" vecino que vive al lado de nombre Alberto es homosexual. A pesar de que sus familiares trataron de "ocultarlo" al final tuvieron que aceptarlo, pienso yo que un factor que debió influir mucho fue el fallecimiento de su abuela, quien como comente en la primera parte, había convencido a su madre de llevarlo a un "retiro religioso". Ahora él, pasado cerca de un año vive fuera de las sombras, inclusive ahora rondando la edad de los 20 años tiene novio, viven juntos y se ven muy felices.

Pero esto no fue lo que más me sorprendió, sino el saber que su primo quien también vive ahí con ellos, también le gustan los hombres. Las aplicaciones que hoy existen para socializar o aquellas para encontrar pareja, traen algunas de ellas la opción de ver a aquellos personas que nos interesan su localización aproximada del lugar donde se encuentren cerca del lugar  de donde estemos.

Y fue a través de la aplicación de Telegram en donde descubrí accidentalmente, que el primo de este chico de nombre Roberto resulto ser también homosexual o bisexual, y esto sucedió al navegar por la opción para ver los Grupos de Telegram que se encuentran cerca de donde vivo, y ver en un grupo con nombre de: Gays en Soltería una foto de él en su perfil, en donde vi sus mensajes buscando un encuentro, un novio ó cómplice. No lo podía creer en ese instante, Que pequeño es el mundo- pensé, al ser un chico desalineado, apático, muy serio y callado pasó completamente desapercibido.

Fue inevitable pensar que quizás ambos primos tuvieron una "relacion" más allá del fraternalismo familiar, y es que tengo la teoría de que la falta de una figura paterna durante la niñez nos puede influir a buscar ese amor paternal que no se obtuvo durante la infancia, y el caso de estos dos chicos parece confirmarlo, el primero de ellos creció con la ausencia de un padre que los abandono, y ser criado por solamente su hermana, abuela y madre; y el segundo con un padre que en realidad no es su padre biológico, y precisamente no es el mejor ejemplo de o que podría ser un padre amoroso, ni preocupado por el crecimiento del chico.

Así que este chico Roberto, sigue creciendo con esta dualidad o mejor dicho secreto, de llevar una vida heterosexual, mientras en el fondo la homosexualidad latente espera por salir.

De alguna manera siento envidia por los chicos de ahora que pueden conocerse a través de estos medios, me hubiera gustado ser adolescente en este tiempo, y quizás haber tratado de socializar con alguno de los chicos que son homosexuales que viven en la misma calle que yo.